ARMAS DE FUEGO EN LA PREHISTORIA
Primera fotografía
Segunda fotografía
Tercera fotografía
En estas imágenes podemos ver perforaciones de una limpieza y tamaño que solo nos imaginamos que han podido ser hechas por un proyectil de pistola, ya que cualquier otro arma de la prehistoria (como un arco o una lanza) hubiera provocado más destrozo en los huesos o distinta forma de orificio.
La primera fotografía pertenece al hallazgo de Broken Hill, en 1921, cuando unos mineros entraron a una galería con gran cantidad de restos humanos. Sin embargo, lo más insólito fue del yacimiento esta calavera, con esa limpia perforación lateral de causa desconocida. Lógicamente, como cabría esperar de un disparo, en la base del cráneo podemos hallar otra perforación, el orificio de salida, apoyando enormemente la teoría de que sea causa de un objeto que atravesó la cabeza de este homo sapiens, dejando un orificio de entrada y otro de salida.
Orificio de salida y entrada |
En la segunda fotografía, vemos un hueso de bisonte, de hace 40.000 años, hallado en Moscú, Rusia. Como en la primera fotografía, podemos ver que la peforación fue realizada por algo que atravesó el cráneo a gran velocidad (los científicos lo atribuyen este limpio agujero a un meteorito de reducido tamaño, que provocó la instantanea muerte del bisote, teoría muy poco probable), ya que si la cabeza del bisonte hubiera sido alcanzada por una flecha o lanza o golpeada con un piedra o hueso, el hueso se hubiera fracturado y el orificio sería irregular. Este no es ese caso.
En la última imagen, podemos observar un cráneo en buen estado con una perfecta perforación frontal, que feu descubierto en la cueva de Moya, cerca de una pequeña localidad catalana. Pertenece a un Cro-Magnon de alta estatura. En esta cueva se han realizado multitud de sorprendentes hallazgos, ya que ha sido habitada durante miles y miles de años. De nuevo, se nos presenta un orificio circular, limpio y el hueso no presenta astillaciones...
En la última imagen, podemos observar un cráneo en buen estado con una perfecta perforación frontal, que feu descubierto en la cueva de Moya, cerca de una pequeña localidad catalana. Pertenece a un Cro-Magnon de alta estatura. En esta cueva se han realizado multitud de sorprendentes hallazgos, ya que ha sido habitada durante miles y miles de años. De nuevo, se nos presenta un orificio circular, limpio y el hueso no presenta astillaciones...
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